Se acerca el verano: cuida tu descanso y tu ocio

Se acerca el verano: cuida tu descanso y tu ocio
1 de julio de 2025 Marta Lozano

El verano se acerca y con él la promesa de descanso, desconexión y tiempo libre. Pero ¿descansamos realmente cuando llega el buen tiempo?

No todo lo que parece “descanso” lo es. Cuando hablamos de descansar, lo primero que pensamos es en dormir. Y aunque el sueño es fundamental, no es el único tipo de descanso que necesitamos. También necesitamos descanso mental, emocional y sensorial. El verano, con sus días más largos y la reducción del estrés laboral o académico, puede ser un gran aliado… si sabemos cómo usarlo. Dormir mejor, sí, pero también desconectar del ruido constante, de las pantallas, del bombardeo de estímulos, de la necesidad de “aprovechar el tiempo” a toda costa.

Un descanso reparador implica:

  • Dormir lo suficiente y con buena calidad de sueño (sin pantallas justo antes de dormir, en un ambiente fresco y oscuro).
  • Reducir la actividad y dejar espacio para el “no hacer nada”.
  • Dar espacio a emociones no procesadas durante el año.

Otra manera importante de descanso es el ocio. El ocio es lo que nos permite disfrutar activamente del tiempo libre. Ver series durante cinco horas puede parecer ocio, pero ¿realmente nos recarga? El ocio sano es aquel que nutre, que nos conecta con los demás, con nosotros mismos o con el mundo.

Las actividades que más aumentan nuestro bienestar son aquellas que implican:

  • Movimiento corporal (caminar, nadar, bailar).
  • Creatividad (pintar, escribir, cocinar).
  • Relación con los demás (pasar tiempo de calidad con amigos o familia).
  • Contacto con la naturaleza (ir al parque, a la playa, a la montaña).

Y lo mejor de todo es que el verano ofrece un escenario ideal para este tipo de ocio: luz, tiempo libre, actividades al aire libre y menos exigencias del entorno. ¿Cómo aprovechar realmente este tiempo?

  • Recupera placeres sencillos: leer al sol, caminar sin prisa, jugar a juegos de mesa, escribir en un diario.
  • Haz planes sin objetivo: no todo tiene que ser productivo. El ocio también puede ser espontáneo, incluso aburrido (y eso está bien).
  • Cuida tu ritmo de sueño, aunque no tengas que madrugar. Dormir bien es clave para disfrutar el día.
  • Permítete no hacer nada. La mente necesita espacio para descansar, y muchas veces ese espacio se encuentra en la pausa, no en la actividad constante.
  • Desconecta de las pantallas. ¡Que sean el último recurso y no el primero! Siendo conscientes normalmente nos impiden descansar y de verdad y disfrutar del tiempo que tenemos.

El verano, con su luz, su calor y su pausa natural, es el momento ideal para volver a lo básico: parar, conectar, respirar. No se trata de llenar la agenda de planes, sino de vaciarla un poco para que entre lo que realmente importa. No pierdas tu verano, ¡aprovéchalo!

Marta Lozano

0 Comentarios

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*